La Jornada de los Engaños es un episodio de la historia de Francia. María de Médicis quería destituir al Cardenal Richelieu. Soportaba cada vez menos la influencia que este ejercía sobre su hijo, el rey Luis XIII. La mañana del 10 de noviembre de 1630, se reunió con su hijo en el palacio de Luxemburgo, en la que le pidió la destitución del Cardenal. Este consiguió irrumpir en medio de la conversación entre madre e hijo y, viendo el peligro que le acechaba, se humilló ante la reina pidiéndole perdón, asegurándole que le era totalmente fiel. La escena terminó con el rey quitándose de en medio retirándose a Versalles. Convencido de que todo estaba perdido, recibió un aviso del rey para que fuera a visitarlo a Versalles. Allí, Luis XIII le demostró la confianza que tenía en él y ordenó que su madre fuera retirada de la corte. La reina se retiró a Colonia donde murió y no volvió a ver a su hijo.
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